Este artículo fue escrito por Jorge Lozano, pastor de jóvenes de la Iglesia Bautista Gracia de Tegucigalpa Honduras. Si te gustaría contribuir un artículo o recurso para ayudar a otros líderes juveniles, lee los requisitos para contribuir.

Los seres humanos por naturaleza somos de estados de animo cambiantes, a diario tenemos que combatir con eso. ¿Que pasa si no nos alimentamos a diario nuestros cuerpos? Realmente se ponen débiles.

Es así que tu espíritu debe de ser siempre alimentado, pero a muchos nos cuesta convertir en rutina diaria la Oración y la meditación de la Biblia. Tiene que ser parte de ti, de mi, de todos. Tiene que volverse una necesidad diaria.

“La oración y la meditación de la Biblia tiene que volverse una necesidad diaria para ti, para mi, para todos.” – Comparte en Twitter

Esta situación podríamos compararla con ponernos a dieta. Los primeros días comenzamos con un buen entusiasmo y son días fabulosos, pero a medida que pasa el tiempo la mente dice que ya no es necesario o que es tiempo de bajar el ritmo. Es allí en tu debilidad que comienzas a comer como antes y tu disciplina, se fue por la borda.

La oración y la lectura de la Biblia llegan a un punto de tu vida que sientes que ya no son necesarios y que todo esta bajo control. Sin embargo, te darás cuenta que al momento de dejarte de la mano de ello, varios aspectos de tu vida se volverán caóticos. La palabra que tienes que meter en tu mente es la perseverancia. Tienes que remar contra la corriente.

Solo así podrás encontrar la energía necesaria para practicar las disciplinas Cristianas.

“Uno de los libros devocionales clásicos es ‘En Pos de lo Supremo‘ por Oswald Chambers (el enlace es un afiliado). Si lo puedes conseguir seria una buena ayuda para tu vida espiritual.” – Dennis