El ministerio juvenil se trata de relaciones. Es sencillo. No hay otra manera de ministrar si primero no entras a su mundo y estableces una relación con la otra persona. Por supuesto, puedes orar por alguien que no conoces, pero si realmente quieres entrar a su vida y ministrarle de una manera integral, tendrás que establecer una relación con esa persona.
Como líderes Dios nos ha llamado a buscar relacionarnos con otros y ministrarles. Es nuestro trabajo como líderes juveniles, y debe ser la actividad en la que invertimos la mayor parte de nuestro tiempo.
Pero parece que muchos de nosotros, en vez de buscar amar a las personas y conocer a los jóvenes de nuestros grupos para poder ministrarles, queremos tener una aventura con las actividades. Es el amor oculto de nuestras vidas y no queremos que nadie se de cuenta que pasamos mas tiempo pensando en nuestras actividades que pasamos con nuestros jóvenes. En vez de poner énfasis en las personas, ponemos énfasis en los programas y actividades.
¿Cual es la primera pregunta que te hacen sobre el ministerio juvenil? Muchas veces es, ¿Como les fue la actividad? Nuestra medida son los números o los sentimientos que tenemos después de una actividad con los jóvenes. Si había suficientes hamburguesas y si a todos les gustaron las dinámicas o juegos que hicimos, somos bien felices. Pero la manera de medir el exito se tiene que cambiar.
Durante el programa muchos líderes se preocupan mucho por hacer que las actividades salgan bien en vez de realmente preocuparse por las vidas de los muchachos. Es una trampa en la que fácilmente caemos como líderes.
Pero una buena administración de tu ministerio juvenil (la planeación detallada de las actividades con un propósito) te llevará a pasar mas tiempo con los jóvenes y menos tiempo con las dinámicas o actividades. Si aprendes a programar bien tu calendario y los eventos juveniles de tu iglesia, veras que hay mas tiempo para ministrar a los adolescentes que llegan a tus actividades, y los jóvenes y adolescentes se darán cuenta que los quieres conocer mas y quieres apoyarles y ministrarles. Se darán cuenta que no solamente te preocupas por las actividades de la iglesia, sino que realmente te preocupas por sus vidas y luchas.
En el diplomado en ministerio juvenil queremos ayudarte a programar mejor tus actividades para que cuando llegues a ellas, puedes tener el tiempo para sentarte al lado de uno de los muchachos y preguntarle como esta. Y en vez de solamente escuchar un poco de lo que están diciendo, tendrás tiempo para escuchar profundamente porque los detalles de la actividad ya están programado.
Somos líderes de JÓVENES no líderes de actividades. Yo quiero ser un MINISTRO DE JÓVENES y no solo un Maestro de Ceremonias.
Inscribete en el siguiente modulo del diplomado en ministerio juvenil para aprender como planear tus actividades y tener mas tiempo para ministrar a los jóvenes.
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