Cada mes en el Centro de Ministerio Juvenil tenemos una reunión con los estudiantes de ministerio juvenil durante la hora de capilla. Hoy estuvimos en nuestro grupo, y les pregunte acerca de las necesidades de los ministerios juveniles. Habia muchas buenas respuestas, pero un tema que se repitió mucho fue la necesidad que los jóvenes tienen de ejemplos, mentores, y adultos involucrados.
La gente adulta es un elemento vital para los ministerios juveniles.
Los Adultos Pueden Ayudar a Los Jóvenes con:
Su ejemplo – Los jóvenes y adolescentes viven en un mundo sin muchos ejemplos de buenos padres, matrimonios, y modelos de personas que saben relacionarse con otros. Los adultos que trabajan en el ministerio juvenil pueden ministrar a los jóvenes, enseñándoles con su ejemplo.
Su experiencia – Todos necesitamos personas que hayan pasado por las experiencias que estan sucediendo en nuestras vidas. Los adultos pueden ayudar a los jóvenes, enseñándoles de sus experiencias.
Su consejo – Mientras pasamos tiempo en la tierra, vemos muchas cosas y obtenemos mucha sabiduría. Los jóvenes necesitan que los adultos les impartan esa sabiduría, dándoles consejo sobre las decisiones importantes de sus vidas.
Su presencia y apoyo – A veces los jóvenes se sienten solos, y a veces les hace falta apoyo de parte de la iglesia. La presencia y apoyo de algunos adultos significativos puede tener un gran impacto en el ministerio juvenil y servir para conectar el ministerio juvenil con el resto de la iglesia.
Si eres uno de los lideres juveniles de tu iglesia, te animo a invitar algunos adultos a participar en el ministerio juvenil. Su ejemplo, experiencia, consejo, y apoyo impactaran a los jóvenes de tu iglesia y comunidad.
Buen día;
Yo inicie trabajando en celulas, como intercesor (guerrero de oración como se le llamaba en esa época) eso fue cuando yo tenía aproximadamente 14 o 15 años, sin duda esa fue una de las etapas más difíciles de mi vida, por la gran rebeldía que llegue a presentar.
Dios bendiga a Hans Cruz (lo conocemos mejor como el Abuelo) y a su esposa Pera (Esperanza) que nos bendijeron, nos tuvieron paciencia, consejos, regaños y ejemplo; ellos nos invitaron a buscar del Señor, digo “nos”, porque no era solo yo, eramos muchos adolescentes (entre 10 y 15).
Hoy, algunos años después les agradezco, y definitivamente es súper importante que en el Ministerio Juvenil hayan adultos o jóvenes maduros que sepan como manejar la situación, como dar una palmada en la espalda cuando alguien la necesite, tener siempre un consejo que dar y una enseñanza que compartir.
Dios les bendiga!!!
Hola. Soy Líder Juvenil en mi Iglesia. El grupo se comienza a conformar, aunque con facilidad hay alrededor de 30 jóvenes asistiendo al grupo, mas no todos se incorporan a las reuniones de jóvenes. Desde hace unas semanas, jóvenes adultos que asistían, dejaron de hacerlo porque sintieron que no pertenecían a el mismo rango de edad, aún cuando el promedio que manejamos es de 20 años. Les hemos invitado a que participen como apoyo, con su experiencia, etc. pero aún así parecen tener algunas otras cosas que hacer. Qué sería mejor, involucrarlos en el liderazgo del grupo, invitarlos a dar pequeñas conferencias o testimonios, o promover a que de entre ellos se forme un nuevo grupo de jóvenes (en lo personal esta opción no me parece la mejor, puesto que de por sí está siendo difícil conformar un primer grupo que sea estable).
Muchas gracias por su ministerio juvenil, me es de mucha edificación y espero poder seguir creciendo y mejorando, compartiendo con los otros chicos el mensaje de Jesús.
Exelente ayuda, en lo personal llevo años afuera del servicio para jóvenes y es muy importante. Gracias