Ayer estuve en una junta de profesores de nuestro Seminario platicando de algunos asuntos académicos, y empezamos a hablar un poco de la misión y visión del instituto.
Las palabras que se usan mucho en las declaraciones de misión y visión son “líderes” y “ministros”, y un punto de discusión que surgió fue el siguiente:
¿Nuestra misión debe ser formar líderes o formar ministros?
La pregunta me hace pensar (como todo) en el ministerio juvenil, y me lleva a la pregunta:
Debemos ser líderes de jóvenes o ministros de jóvenes?”
Definiciones de las Palabras
Para contestar bien la pregunta, tenemos que ver los significados de las dos palabras.
Una definición de líder es “la persona capaz de inspirar a otros con un sueño.” Algunos definen el liderazgo como “influencia.” Otros dicen que es la persona que actúa como la cabeza de un grupo.
Las definiciones de ministro, en la mayoría de los casos, tienen que ver con los gobiernos y los que ejercitan puestos altos de un país. Cuando vemos definiciones religiosas de la palabra ministro, también vemos algunas ideas equivocadas. La idea común es que un ministro es un sacerdote, pero las funciones de un sacerdote, muchas veces, no tienen que ver con el significado Bíblico de la palabra.
En la Biblia, ministro significa “uno que sirve.” Es una definición importante para nuestra discusión. Los ministros son los que sirven a los demás, y no siempre significa alguien que ejercita poder.
En la mayoría de los casos, vemos a los líderes como los que tienen poder y nuestra idea de los ministros nos hace pensar en los que sirven, pero:
¿Puede alguien ser líder y ministro al mismo tiempo?
Qué Dice Jesús?
Un pasaje muy importante para este tema es Mateo 20:25-28.
Cuando lo oyeron los otros diez, se indignaron contra los dos hermanos. Jesús los llamó y les dijo: Como ustedes saben, los gobernantes de las naciones oprimen a los súbditos, y los altos oficiales abusan de su autoridad. Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que quiera hacerse grande entre ustedes deberá ser su servidor, y el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de los demás; así como el Hijo del hombre no vino para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos.
Jesús está diciendo que el liderazgo, o la grandeza, tiene su base en servir a los demás. Ser líder no es malo, pero el liderazgo tiene su base en el servicio.
La mejor manera de ser un líder es ser un ministro. Los buenos líderes de jóvenes son ministros (siervos) de jóvenes. (comparte esta frase en twitter)
Si quieres que tus jóvenes te sigan, conviértete en su esclavo, sirviéndoles en todo.
(Foto por Nicdalic)