Uno de los temas mas importantes para los líderes de jóvenes es la unidad. En muchos de los correos que me llegan de varios líderes me piden consejo para mejorar la unidad en sus grupos, y me han invitado mas de una vez a hablar sobre la unidad. Es probable que tu, como líder, también busques conseguir la unidad en tu grupo. Todos queremos que los jóvenes sean unidos y que nuestros grupos experimenten un grupo donde todos son del mismo sentir.

Pero hoy te quiero decir que la unidad NO ES EL OBJETIVO DE TU MINISTERIO.

La unidad no debería ser nuestro objetivo. Es un resultado de lograr nuestro objetivo (comparte en Twitter).

Los que buscamos ¨crear la unidad en nuestros grupos¨ estamos equivocados desde el principio. Dios nunca nos manda a crear unidad. Nos manda a ser unidos, pero dicha unidad es el resultado de algo mas.

Muchas veces leemos Juan 17 y la oración de Jesús pensando que la unidad es la prioridad mas alta de nuestra vida. No estoy diciendo que la unidad no sea una prioridad. Estoy diciendo que la unidad no es la primera prioridad.

Nuestra primera prioridad debería ser lo que encontramos en Juan 17:21: “Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado.”

Si nuestros jóvenes estan EN CRISTO y EN EL PADRE, el resultado va a ser la unidad entre ellos mismos. En el pasaje, Cristo esta orando que sean uno, pero esa unidad solo viene de estar en El. Cristo experimentaba la unidad con el Padre por el tiempo que pasaba con El.

Mi meta, mi objetivo, mi prioridad, es ayudar a mis jóvenes a unirse a Cristo y estar en El, conociéndole y haciendo lo que les manda. El resultado de esto se vera en la unidad en mi grupo.

No basta con una platica sobre la unidad. Por mas que nos esforcemos nosotros, no vamos a lograr la unidad si no estamos conectados a la vid (véase Juan 15). Esfuercate por ayudar a tus jóvenes a estar en Cristo. Esto resultara en la unidad de tu grupo.

¿Que haces para ayudar a tus jóvenes a “estar en Cristo”?