Esta entrada fue escrita por Gibran Sánchez, un gran amigo y licenciado en Psicología Social. Ademas cuenta con una licenciatura en Teología e Idiomas por el Seminario Teológico Bautista Mexicano. Actualmente labora como consultor de empresas en SBS Facilitadores, estudia la maestría en Teología y Mundo Contemporáneo en la Universidad Iberoamericana, y es guitarrista de la banda cristiana NEXT+.

Nuestra visión siempre está en constante cambio y dinamismo, jamás está estática. El asunto es que esta puede irse haciendo cada vez más pequeña hasta el punto de la extinción o hacerse cada vez más grande hasta el punto de la realidad, depende del cuidado y la alimentación que le demos.

Te comparto mis 5 mejores consejos prácticos para ENGRANDECER tu visión:

  1. Ten visiones constantemente – El pastor y gran emprendedor Bill Hybels definió visión como: “Una fotografía del futuro que produce pasión”. Por eso creo que la visión, siempre es el resultado de varias visiones durante el día. Por ejemplo, el famoso psicólogo Victor Frankl, en su libro “El hombre en busca de sentido” narra que cuando estaba en los campos de concentración nazi, frecuentemente cerraba los ojos y se imaginaba que estaba dando una conferencia ante miles de personas sobre su experiencia en los campos de concentración. Descubrió que las personas que habían dejado de visualizar su futuro fuera de los campos, tenían menos probabilidades de salir con vida.
  2. Asiste a lugares que te inspiren – La Biblia enseña que “no hay nada nuevo debajo del sol” (Ecl. 1:9). Aunque pudiera parecer contradictorio a lo que se nos ha enseñado sobre la “innovación”, en realidad significa que las ideas originales son siempre producto de una mezcla de ideas que vamos almacenando a lo largo de nuestra vida. Por ello, la tarea de un gran visionario es tener la mayor cantidad de experiencias creativas para tener más referencias y más posibilidades de generar una idea única e innovadora.

    Asiste frecuentemente a eventos y lugares que te saquen de la rutina. Ve a conciertos, obras de teatro, expos, conferencias, hoteles, shows y espectáculos, parques de diversión, museos, restaurantes, viaja a otros pueblos, ciudades o países, presta atención a los detalles y desarrolla tu capacidad de asombro. Este hábito puede implicar inversión de tiempo y dinero, pero al final lo vale y se vuelve redituable.
  3. Lee sobre la vida de tus héroes – Basta un click para conocer los detalles de la vida de una persona y más si es famosa o hizo algo significativo. Te recomiendo leer biografías de personas que admiras, ya que además de inspirarte y aprender de sus aciertos y desaciertos, los humaniza. Quiero decir que mientras lees te darás cuenta que entre tú y esos personajes no hay ninguna diferencia significativa que te impida llegar tan lejos como ellos.

    Por ejemplo, en algún momento leí sobre la vida de Alfred Nobel, famoso por los “premios de la paz”, entre otros. ¿Sabías que la razón que lo llevó a donar en su testamento toda su riqueza a la inversión de premios en beneficio de la humanidad, fue que, mientas hacía pruebas para inventar la dinamita, mató a su hermano Emilio Nobel por accidente y a otras 4 personas más? Al día de hoy, ese invento ha sido de enorme importancia para la construcción, la minería y la ingeniería, pero también para la industria militar. Lo interesante es que un grave error lo llevó a crear la Fundación Nobel, la cuál actualmente promueve y premia patentes de miles de nuevos inventos que solamente son para el beneficio de la humanidad.
  4. Invierte en comidas – Hace varios meses leí en una revista de finanzas sobre la disciplina que tenía un director general de una prestigiosa empresa de tecnología de invitar una vez al mes a comer a personas que él consideraba creativas e innovadoras. Juntaba a 5 personas, a un cantante famoso, a un empresario exitoso, un atleta olímpico, un diseñador prestigioso y a un reconocido actor de películas. Lo único que hacían era platicar y disfrutar de la comida. El director general de esta empresa estimulaba su creatividad aprendiendo de ellos, de sus comentarios, de sus experiencias y de sus ideas.

    Desde entonces, he hecho el hábito de invitar a comer a personas y amigos que considero talentosos en distintas áreas para aprender de ellas y pulir aún más la visión que Dios ha dado. No es necesario que sean famosos, el talento y las ideas está en las personas que nos rodean.
  5. Plasma visiblemente tus sueños – ¿Qué es lo primero que ves al despertar? Si lo primero que tus ojos ven es tu celular, tu correo o tu Facebook, no te preocupes, estás dentro del promedio de lo que la mayoría de las personas hace. Por otro lado, puedes tomar la decisión de escribir los sueños que Dios te ha dado y pegarlos en un lugar en donde diariamente al despertar te recuerde los motivos que tienes para levantarte de la cama y seguir adelante.

    Dibuja o escribe tus sueños en un rotafolio, incluso puedes hacer un collage con fotos. Plasma en imágenes y palabras tus metas a corto, mediano y largo plazo. Edmundo Hoffens fue el que dijo: “La única diferencia entre un sueño y un objetivo es una fecha.”

    Dios mismo recomendó al profeta Habacuc hacer algo similar;
    “Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella. Aunque la visión tardará aún por un tiempo… espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará”. (Hab. 2:2-3)

Recuerda, una visión grande nunca nace siendo grande, siempre es producto de una constante disciplina y trabajo en ella para hacerla crecer y mejorar. No tomes estos consejos como eventos que podrías aplicar en algún momento, sino como hábitos que necesitas incluir en tu vida diaria. ¡Comienza hoy!

“Una visión grande nunca nace siendo grande, siempre es producto de una constante disciplina y trabajo en ella para hacerla crecer y mejorar.” (Da clic para compartir la frase en twitter)